6 tipos de filtros y para qué sirve cada uno

Entrados ya en pleno verano es prácticamente imposible huir del calor. Un clima que afecta especialmente a nuestros coches. En una entrada anterior hablamos sobre diferentes trucos para mantener a raya el calor en el coche. Hoy nos centraremos en otros elementos que sufren con las elevadas temperaturas: los filtros.

Los filtros son imprescindibles para que el coche pueda funcionar de manera óptima. Su principal función es la de depurar y purificar las sustancias que fluyen por el vehículo. Se extienden por todo el coche y cada tipo de filtro está especializado en una depuración específica.

A continuación explicamos los diferentes tipos y los cuidados de cada uno. Toma nota.

Filtro de aceite

Cuando oímos hablar de filtros, por regla general el del aceite es el primero que nos viene a la cabeza. Este filtro ayuda a que el aceite usado para la lubricación del motor esté lo más limpio posible, eliminando las micropartículas que puedan estar en suspensión y puedan dañar el motor.

La revisión de este tipo de aceite es fundamental. Ha de hacerse cada 10.000 o 15.000 kilómetros. Si no se realiza periódicamente, o intentamos alargarlo más de la cuenta, podemos encontrarnos con el filtro obturado y hacer que no pase el aceite. Eso podría provocar roces entre las piezas y el daño del motor.

Filtros de combustible

Los combustibles también contienen impurezas. Dependiendo del tipo de combustible encontraremos unos filtros u otros. Por ejemplo, en las motorizaciones de gasolina el filtro elimina el paso de impurezas. En el caso de los vehículos de gasoil, además de para bloquear las impurezas, el filtro retiene la humedad para prevenir la corrosión del motor.

¿Cuándo cambiarlo? Dependerá del tipo de motorización. Para motores de diesel se recomienda a los 20.000 km. mientras que para gasolina es a los 40.000 km.

Filtro del aire

Con lo comentado hasta aquí se deduce que el filtro de aire servirá para eliminar la entrada de partículas dañinas para el motor. Aunque parezca menos importante que los anteriores, con el aire limpio conseguiremos mejorar el proceso de  combustión.

En este caso, más que por kilometraje, se recomienda su revisión y cambio de manera anual. Aunque también hay que tener en cuenta en qué entorno nos movemos con el vehículo, no es lo mismo circular por ciudad que por campo.

La contaminación del aire o el polvo de la tierra son factores influyentes en la vida útil del filtro.

Filtro del habitáculo

Quizás sea uno de los filtros más desconocidos. Es el encargado de limpiar el aire que entra dentro del coche. No solo hablamos de polvo o polen, también hablamos de las partículas que se desprenden de algunos coches.

Es un filtro imprescindible para el buen funcionamiento del sistema de climatización.

Se aconseja su revisión y cambio de manera anual o según el kilometraje marcado por el fabricante. Es aconsejable cambiarlo en la temporada de primavera para eliminar la suciedad o el posible moho que se haya acumulado durante el otoño e invierno.

Filtro refrigerante

Para regular la temperatura óptima de vehículo utilizamos el líquido refrigerante. En él también podemos encontrar  partículas contaminantes que afectan al funcionamiento del motor. Por eso es importante la función de este filtro. Lo mejor para saber cuándo hay que cambiarlo es fijarse en las especificaciones del fabricante.

Filtro hidráulico

¿Te gustaría conducir sin dirección asistida? Pues precisamente es este filtro el que interviene en este proceso encargándose de mantener limpio el aceite hidráulico.

La extensión de vida útil de este filtro viene determinada por el fabricante. Sin embargo, puede fallar con anterioridad cuando se utiliza líquido de baja calidad o debido a los efectos del calor del motor.

Se nota claramente que el filtro de dirección asistida hidraúlico necesita ser revisado cuando:

• Se mueve de manera irregular.
• Se escuchan ruidos raros.
• El aceite se ensucia en un corto periodo de tiempo.

Aunque a priori los filtros no parezcan elementos vitales de nuestro vehículo, con un buen mantenimiento y una revisión anual del coche, evitaremos dañar piezas más complejas.